Por Kike Posada kikeboom@gmail.com
Ha emprendido su último viaje el gran Evángelos Odysséas Papathanassíou, mejor conocido como Vangelis; músico, compositor multi instrumentista, pintor, viajero del Cosmos.
Creador de paisajes sonoros en las bandas sonoras de innumerables películas entre ellas Chariots of Fire (1981), Blade Runner (1982), Missing (1982), Antarctica (1983), The Bounty (1984), 1492: Conquest of Paradise (1992), y Alexander (2004), El Greco (1998).
Discos que marcaron un antes y un después en la música electrónica, New Age y Pop Clásico de los siglos 20 al 21.
Fais que ton rêve soit plus long que la nuit (1972)
Earth (1973)
Heaven and Hell (1975)
Albedo 0.39 (1976)
Spiral (1977)
Beaubourg (1978)
Hypothesis (1978; unofficial)
The Dragon (1978; unofficial)
China (1979)
See You Later (1980)
Soil Festivities (1984)
Mask (1985)
Invisible Connections (1985)
Direct (1988)
The City (1990)
Foros Timis Ston Greco (1995)
Voices (1995)
Oceanic (1996)
El Greco (1998)
Mythodea – Music for the NASA Mission: 2001 Mars Odyssey (2001)
Rosetta (2016)
Nocturne: The Piano Album (2019)
Juno to Jupiter (2021)
Vangelis fue el creador del tema “Heaven and Hell” que la serie estadounidense de los 70 ‘s Cosmos que se utilizó como tema principal. El presentador era el astrónomo Carl Sagan.
Este genio surge en la música popular a finales de los años 60 con tres compatriotas suyos, Demis Roussos, Loukas Sideras, and Anargyros Koulouris, en la banda de rock progresivo y psicodélico, Aphrodite ‘s Child. Demis Russos tendría también una importante carrera en la música pop internacional.
Durante su vida, Vangelis colaboró con innumerables cantantes como Jon Anderson, de la banda inglesa YES, Irene Papas -cuando homenajeó la música griega-. Montserrat Caballe, Angela Gherorghiu,
Fue el favorito de instituciones culturales europeas. Musicalizó el Campeonato Mundial de Atletismo de Grecia en 1997, los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Himno oficial del Mundial de Fútbol, Japón – Corea 2002 también fue suyo.
Colaboró con la NASA y la Agencia Espacial Europea para la creación de obras como Mythodea, Rosetta y Juno To Jupiter.
Recibió la Orden de Caballero de las Artes y Letras y la Legión Emeritus de Honor , de los gobiernos de Francia y Grecia.
Músicos colegas, artistas, directores de cine, científicos, filósofos participaron en un documental esencial de ver llamado “Vangelis y el El Viaje a Ítaca”
El director de cine Ridley Scott dijo: “Vangelis buscaba expresar los sentimientos que las películas producían en él”.
Oliver Stone, por su parte dijo: “Es un hombre callado, un monje que nos lleva a su mundo interior”.
El productor David Puttnam: ” Vangelis nos dejó un nuevo paisaje musical”.
La soprano Montserrat Caballé: “Vangelis podía abrir las ventanas del Cielo”.
El músico Jon Anderson: “Es un niño travieso que no para de crear y gozar de sus propias creaciones”.
Vangelis no escribía ni leía partituras, Lo matricularon en el conservatorio desde muy niño pero no quiso continuar, Le dijo a sus padres “Tengo una mejor manera de hacer música”. Le gustaba intervenir el piano con utensilios de cocina y experimentar distintas sonoridades.
En el documental “Vangelis y el Viaje a Ítaca”, él mismo comenta:”¿Por qué necesitamos de la música? ¿Por qué todos hablamos el idioma de la música? No hablamos mandarín o francés pero hablamos música. Porque sabemos, silbamos, tarareamos de niños. Nadie nos enseñó, está implantado en nosotros. Puedes decir ‘no sé de música’; porque no sabes leer partituras. Yo tampoco. La música te hizo, es el oxígeno más fuerte. Te habla directamente a tu espíritu. No nos pertenece, es un código. Es lo que mueve al Universo. No puedo negar eso. Tenemos que estar disponibles, como un radar…el mensaje viene”.
Para mí, Vangelis es un viajero del tiempo que llegó en su nave espacial compuesto de teclados, circuitos, perillas, botones, pedales para abrirnos los chakras a la percepción de lo magnificente del Universo. Me sanó innumerables veces y me sigue sanando cada vez que lo escucho. Su capacidad de narrar las más grandes historias desde el trasfondo cinemático, podía decir más que los mismos diálogos de las películas.
Sacó en todos nosotros las emociones y sentimientos más sublimes y nobles. Su música no tenía fronteras, ni rótulos ni clasificación.
Vangelis era un canal, un channel, recipiente de las frecuencias más altas. Casi todas sus obras son consideradas llaves tonales para invocar a los ángeles o maestros ascendidos. Por ejemplo “1492 Conquest of Paradise” se usa para invocar la Llama Violeta y al Maestro St. German.
Un orfebre, un artesano, un alquimista, dedicado a lo suyo, toda su vida, 50 discos en 50 años de carrera.
Decía que era un atleta. “Trabajo horas y horas con mi cuerpo, mi cerebro, mis dedos. En cualquiera de sus súper equipados estudios, el Nemo de Londres o el Epsilon de París. Esos eran su guarida, la cueva del mago.
No se rigió nunca por la industria musical y sus tendencias, o por la sociedad. Decía “La sociedad crea la soledad. Con la música, nunca he estado en soledad”.
Era muy cauto a la hora de escoger quién entraba en su círculo. No tuvo descendencia. Daba muy pocas entrevistas. Manifestó que la lealtad para él era lo más importante y que fue traicionado varias veces.
De pocas apariciones públicas, ni siquiera asistió a la entrega de los premios Oscar en 1982 cuando, nominado, ganaría por la banda sonora de la película Carrozas de Fuego.
“No me gusta que me empujen; detesto ver la música como competencia”.
Si hubo algo más personal que su música fue su pintura. Solo una vez lo convencieron de exponer y sufrió mucho por ello. La gira itinerante “Vangelis Painting” recorrió varios países de Europa, Brasil, Argentina, Cuba. Nunca quiso vender ni uno de sus cuadros. “Mi música es pública, pero mis pinturas no. Me siento desnuedo cuando las ven”, dijo.
Componía en vivo y grababa en una sola toma casi toda su obra. Podía recordar cada nota sin necesidad de transcribir o registrar.
Para mí era un Claude Debussy mezclado con un Nicola Tesla. Supo articular la energía de ondas sonoras con sus instrumentos avanzados, sus pedales, sus efectos, su mundo.
Al igual que los maestros del sintetizador de su generacion como Jean Michel Jarre, Kitaro, Isao Tomita, Mike Oldfield, Wendy Carlos, Robert Moog. inspiraron a toda una estirpe de musicos electrocnicos que alimentaron la escena pop posteriormente como Kraftwerk, Giorgio Moroder, New Order, Daft Punk. El mismo desarollo del EDM.
Pero nadie como él para transmitir grandeza, solemnidad, lo insondable y dramático de su arte.
Su legado es gigante, eterno, imprescindible. Fue un creador de ambientes, paisajes, climas. Al escuchar sus discos recibías montones de información espiritual. Nos hizo sentir libres, que éramos parte del Universo, lo que realmente somos.
Evángelos, fuiste el evangelista del arcángel Sandalfón, el de la música. Trajiste la música del Cielo.
Tu fascinación con el Universo. Tu curiosidad por el más allá, tu amor por la Física, la ingeniería, la astronomía. Un asteroide lleva tu nombre de dios como tu Antigua Grecia.
χάρης, χάρης, χάρης. Gracias, gracias, gracia,
Buen viaje Maestro del Cosmos.
Escucha el Audio
Observa el video